En Ubrique, en Lo De Rafa, en abril de 2005, Markus demostró su calidad y su profesionalidad.
Un grupo de hipnotizados se convirtieron en bebés. Según cuenta Markus «hay que resaltar que Ubrique es una comunidad pequeña en dónde todos los vecinos se conocen. Ver a los suyos hipnotizados es para ellos un auténtico acontecimiento».